El pasado martes, 20 de enero, se ha celebrado en la iglesia Evangélica Ebenezer, situada en el barrio de Balàfia, de Lleida, una oración ecuménica, como acto central de la Semana por la unidad de los cristianos.
Fieles de todas las iglesias cristianas de Lleida, con sus representantes (sacerdotes, pastores,...) y autoridades civiles, han llenado la iglesia, en un acto ecuménico en el que se ha insistido en la unidad de los cristianos como deseo del mismo Cristo, "Que todos sean uno, como tú, Padre, estás en mí y yo en ti. Que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado." (Jn 17, 21).
La necesidad de orar por la unidad de los cristianos viene de 1908, si bien, los actos conjuntos son posteriores. En Lleida ciudad hay 8 iglesias cristianas: la Católica, que es la más numerosa, la Ortodoxa, la Copta, y 5 iglesias Evangélicas: Adventista, Baptista, Bíblia Oberta, Ebenezer y Pentecostal. Y desde hace años realizan este acto conjunto, dentro de la Semana por la unidad de los cristianos, que siempre tiene lugar del 18 al 25 de enero.
La celebración ha tenido varias partes, en las que, representantes de las diversas iglesias han ayudado a la reflexión sobre la unidad de los cristianos que profesan una misma fe en Jesús. Las corales Ebenezer, Bíblia Oberta, Parroquia Virgen del Carmen, Adventista y Ortodoxa, han intercalado cantos entre las lecturas y reflexiones, y que, junto con los instrumentos musicales han facilitado la oración y la reflexión.
El Pastor Evangélico Ebenezer, Juanjo Escudero, señaló el privilegio de poder celebrar este acto juntos, en paz y armonía, cuando muchos cristianos en otras partes del mundo son perseguidos por su fe.
Mn. Antoni Agelet, en representación del obispo Joan Piris (ausente de Lleida por razones pastorales), explicó que dicha Semana es un tiempo para que la Iglesia extendida por todo el mundo, tome conciencia de que esta unidad "Que todos sean uno" todavía no se ha alcanzado, y que, ante la pluralidad de iglesias cristianas, se precisa una conversión interior, oración individual y en común, dejando que el Espíritu actúe para lograr la unidad. Esto pasa por reconocer que el Espíritu actúa también en las iglesias cristianas no católicas, en ceder iglesias y espacios católicos para el culto de otras iglesias cristianas, como ya se hace en la parroquia Virgen del Carmen, de Lleida, etc. Y sobre todo, teniendo en cuenta que es mucho más lo que nos une (la fe en Dios y el reconocimiento de Jesucristo como único Señor), de lo que nos separa (diferentes maneras de hacer, que es lo que nos diferencia). Se ruega por una unidad en diversidad, que no implica uniformidad.
El Padre Daniel Simón, ortodoxo, ha sido el encargado de hacer la reflexión sobre los textos bíblicos que se han leído. Ha comentado que, actualmente, la Iglesia está muy dividida y que los cristianos no manifiestan la alegría del Evangelio. Esto es consecuencia del alejamiento del mensaje cristiano, y de la creencia que tiene cada grupo de tener la verdad. En la medida que nos alejamos del centro, Jesucristo, nos alejamos también de los hermanos. Es por ello que, para lograr la unidad, hay que estar unidos a Jesucristo.
La oración de los fieles la ha dirigido la Sra. Francesca Agustí, delegada de Ecumenismo de la diócesis de Lleida, quien ha recordado el lema de este año "Dame de beber".
Por último, todos juntos y cogidos de las manos, en señal de unidad, hemos cantado la oración del Padrenuestro, y nos hemos despedido deseando que el Espíritu nos fortalezca para encontrar caminos de unidad entre los cristianos.
Conchita López Torres