El obispo de Lleida, Salvador Giménez, ha visitado este viernes a los niños y niñas que participan en el cuarto y último turno del casal de verano Vacances per Créixer, que se ha realizado a lo largo de los meses de julio y agosto en las instalaciones del Col·legi Episcopal Mare de Déu de l'Acadèmia bajo la gestión de la Fundació Verge Blanca, y que finalizan el próximo viernes 26 de agosto. Vacances per Créixer ha organizdo cuatro turnos de actividades de ocio y educativas que han dado la posibilidad de hacer estancias de verano a unos 200 niños de entre 4 y 12 años de familias de Lleida en situación de vulnerabilidad. Estos casals de verano se complementan con los dos turnos de estades que se han hecho en la Acadèmia Mariana dirigidas a adolescentes, un casal de temática científica organizado conjuntamente con el Institut de Recerca Biomèdica de Lleida (IRB) y unos campamentos. En total, estas actividades han movilizado alrededor de 400 niños y adolescentes, a los que cabe añadir también a los participantes en los casals municipals de la Paeria Estiu en Joc, que se han desarrollado en las escuelas Pràctiques II, Riu Segre, Parc de l'Aigua, Balàfia y Gimenells i Raimat, gestionados por la Fundació Verge Blanca.

Vacances per Créixer ha contado con la colaboración económica de la Diputació de Lleida y del Banc dels Aliments, que aporta los desayunos y las comidas de los niños participantes, que vienen de entornos con riesgo de exclusión social, además de los donativos particulares, como la cesión de una piscina por parte de la empresa Fluidra. También cabe remarcar las aportacione de Caixa Proinfància, de la Fundació La Caixa, y de las ONG Educo, Safe the Children y Provistas. Los niños y niñas han llegado al casal derivados por Cáritas, las Llars del Seminari, diversas parroquias y entidades como Cruz Roja o el Servei d'Atenció Especialitzada (SIE) de la Paeria.

El obispo Salvador ha tenido la oportunidad de saludar a los niños durante el desayuno, justo antes de que salieran de excursión al Parc de l'Aigua, i ha podido intercanviar impresiones con los monitores, acompañado por el presidente de la Fundació Verge Blanca, Joan Ramon Saura; su gerente, Òscar Costa; el director de Vacances per Créixer, Jordi Bulich y la directora del col·legi Episcopal, Maria Antonieta Mateus.

El obispo Salvador ha destacado la importancia "de garantizar que los niños y niñas de familias sin recursos económicos también puedan participar de las actividades educativas y de ocio" y ha subrayado el buen trabajo de entidades como la Fundació Verge Blanca, que trabajan para "borrar en la medida de lo posible las barreras sociales entre las personas".

La inscripción a Vacances per Créixer tiene un precio de 30€ por niño, que cubre una parte del coste real de la actividad, gracias a la colaboración económica y material de la Diputació de Lleida y del Banc d'Aliments, aunque muchos de los participantes toman parte gratuitamente de la actividad, ya que Cáritas cubre sus gastos.

Òscar Costa, gerenet de la Fundació Verge Blanca, destaca el trabajo que se ha realizado este verano desde esta entidad sin ánimo de lucro, tanto con los casals propios como con la gestión de los casals municipals Estiu en Joc. "Hemos movilizado a unos setenta monitores y, sumándolo todo, alrededor de un millar de niños y adolescentes". El presidente de la Fundación, Joan Ramon Saura también se mostraba satisfecho: "Este año, una vez superadas las limitaciones que nos impuso la pandemia, hemos tenido un verano muy exigente, pero redondo".