El Rectorado de la Universitat de Lleida acogió ayer la presentación del libro ‘Canvis polítics i qüestió religiosa. El Bisbat de Lleida (1931-1939)’, del historiador Jaume Barrull Pelegrí. El libro, publicado en la colección El Fil d’Ariadna de Pagès Editors, es un estudio sobre una encuesta que la Santa Sede hizo a los obispados que habían quedado en la zona republicana durante la guerra civil en el año 1939 –incluso antes de terminar el enfrentamiento–, buscando su opinión sobre esta época dividida en tres períodos: antes de la guerra; durante el mismo conflicto bélico, que es la parte central; y la inmediata postguerra.

Según el historiador leridano, “en el Obispado de Lleida tenemos la suerte que se conservan las encuestas de 259 parroquias, sólo faltan trece y las seis de Lleida, y es suficientemente significativo para ser un testimonio valioso de lo que pensaban los sacerdotes que contestaron.

Jaume Barrull remarca que “era un documento interno, donde salen pocos nombres, ya que no estaba pensado para reprimir; simplemente era una evaluación personal sobre la iglesia y la sociedad de aquel período”. Por ello, considera que “decían la verdad, aunque este concepto a menudo es impreciso” y añade que simplemente había algunos sacerdotes más moderados que otros. De hecho, dice el exprofesor de la UdL, “pocos curas se apuntan a interiorizar demasiado el discurs del régimen”, con ejemplos como que “pocas veces citan a los muertos como caídos por España” o otros que, preguntados por si la vida religiosa estaba aumentando en su parroquia, responden que sí, “pero que durará poco, sólo mientras dure el miedo al nuevo régimen”.

Jaume Barull ha estudiado todo el territorio del Obispado de Lleida de entonces, con mucas parroquias aragonesas, pero no ve diferencias significativas entre ellas en las respuestas.