La ciudad de Lleida acogió, el 28 de octubre, la celebración de la 43 Encuentro de Pesebristas de Cataluña y Baleares, organizada por la Agrupación Ilerdense de Pessebristes, con motivo
de su 50 aniversario. Su presidente Ángel León agradeció la respuesta tan positiva a la convocatoria: "No pensábamos reunir a tantos belenistas en Lleida", dijo. Y no sin razón, ya que han sido más de 200 los participantes, con 27 entidades representadas de toda Cataluña, además de los "Belenistas" de Mallorca
El consiliario de los pesebristas leridanos, Mn. Vicenç Alfonso, en su saludo a los participantes, enalteció el pesebre, destacando que por encima de todo era una representación plástica de un hecho sagrado, el Nacimiento de Jesús. Una tradición que se mantiene viva pero que, al mismo tiempo, es más necesaria que nunca: "El mundo del pesebrismo toca el corazón de todos", aseveró el consiliario.
El encuentro se inició con un acto de bienvenida oficial en el salón de Plenos del Palacio de la Paeria. Allí pudieron contemplar una colección de once extraordinarios dioramas bíblicos, colocados en el patio del Palacio, obra de Josep M ª Ramón y muestra del mejor arte belenista que se hace hoy en Cataluña.
El segundo escenario del Encuentro fue la Catedral Nueva donde, a las 12 del mediodía, el obispo Joan Piris presidió una Eucaristía, concelebrada por los consiliarios de los belenistas de Reus, Barcelona y Lleida, así como otros sacerdotes leridanos y miembros del capítulo.
En su homilía, nuestro obispo Juan elogió el belenismo y agradeció el trabajo de los pesebristas con estas palabras: "Vosotros hacéis una tarea evangelizadora importante.
Tiene la cualidad de hacer una obra plástica y artística donde, gracias a la presentación de estos cuadros bíblicos, se haga llegar la luz de Cristo a muchos que pasan al lado del camino.
Es una vocación particular que puede ayudar a la fe y, de hecho, sirve y mucho para transmitir la espiritualidad de la Encarnación de Dios ".
El calor navideño de la celebración se hizo más evidente cuando, en el momento del ofertorio, el franciscano P. Joaquim Recasens presentó una imagen del Niño Jesús, copia fidedigna de la que se venera en la Basílica de la Natividad de Belén, ofreciendo en nombre de la comunidad franciscana de Lleida a los Pesebristas leridanos.
Él mismo depositó la imagen junto a las de José y María, colocadas en una lateral del presbiterio y que conforman el pesebre de la Agrupación y de la ciudad de Lleida, a la vez que, al final de la celebración, dirigió unas palabras significando la donación: "... Queremos que este Niño Jesús forme parte de la ciudad y lo haga estando en el Peu del Romeu, estando en la Catedral, o bien estando en la Paeria. En el pie del Romeo porque simboliza el lugar donde llega la Luz del mundo en Lleida, que es el Evangelio de Cristo y lo lleva Santiago que fue, al mismo tiempo, iluminado por un farolillo.
En la Catedral porque figuradamente representa la gran parroquia de toda la comunidad cristiana leridana. Y en la Paeria porque lo mejor que podemos ofrecer los cristianos a nuestro mundo es lo que para nosotros es el mayor de los tesoros: el Evangelio que ha sido posible porque Dios se ha hecho Niño ".
Es costumbre que cada Navidad la Agrupación de Belenistas estrene una Villancico nueva hecha por autores leridanos. La Eucaristía, como no podía ser de otra manera, concluyó con el canto de una de ellas, la "Villancico de Lleida", estrenada en 1964, con letra de Carlos Cepero y música de Josep Prenafeta, que interpretó la Coral Estel bajo la dirección de Gemma M ª Naranjo.
Los pesebristas se trasladaron a continuación a la antigua capilla de Santiago del Peu del Romeu, sede de los belenistas leridanos. Allí, en medio de las referencias a la tradición de los "Farolillos de Santiago", pudieron contemplar una extraordinaria exposición de 77 dioramas y pesebres de varios maestros belenistas leridanos.
De entre todos ellos cabe mencionar los legados de pesebres en miniatura de Paulina almendras y los dioramas de Joaquina Barrufet, así como la colección de dioramas bíblicos de Emili Tordera y Martha Pérez y los dioramas y pesebres de Conxita Castellano.
El Encuentro concluyó con una Comida de Hermandad y, por la tarde, se subió hasta la Seu Vella, donde se hizo una visita guiada.
Lleida fue este 28 de octubre, y por un día, la capital catalana del pesebrismo.