Iniciación cristiana de adultos
Durante el curso pastoral 2010-2011 estuvimos trabajando en nuestra Diócesis el objetivo de la Iniciación Cristiana, estudiando i madurando la posibilidad, entre otras acciones, de instaurar el Catecumenado de Adultos (a partir de los 18 años). Tanto el Consejo Presbiteral como el Consejo Pastoral Diocesano, tomaron nota de esta reflexión. Por eso hice la propuesta correspondiente en la Asamblea diocesana del 5 de junio , y después quedó instaurado al ámbito diocesano “con la colaboración de las parroquias de los candidatos”.
Este domingo, 29 de abril, a les 19,30 h, en nuestra Catedral tendré el gozo de celebrar los tres sacramentos de la iniciación cristiana (Bautismo, Confirmación y Eucaristía) con un grupo de adultos que han seguido el itinerario adecuado de preparación i formación catequética en su propia parroquia, de acuerdo con el Servicio diocesano para el Catecumenado. Este Servicio con materiales formativos, pedagógicos, retiros, etc., está a disposición de los párrocos, catequistas i catecúmenos.
En la medida de lo posible, tratemos de seguir un iter catecumenal adaptado a cada persona, según sus circunstancias y aptitudes. En todo caso, la pauta normativa es el Catecismo de la Iglesia Católica (1993) y conviene recordar que el Catecumenado “no es una simple exposición de dogmas y mandamientos, sino una formación y aprendizaje de toda la vida cristiana debidamente alargado, a través de los que los discípulos se unen con su maestro, Jesús” (cfr. Concilio Vaticano II, Constitución Ad Gentes 14).
Como información general es preciso decir que la celebración del rito de ingreso al catecumenado se suele hacer el primer domingo de Adviento, en una de las misas parroquiales presidida por el rector de la parroquia o un delegado. En esta celebración el candidato pasa a ser catecúmeno por la Signación, la entrada en la Iglesia y la recepción de los Evangelios, que le acompañarán, como texto fundamental, a lo largo de todo el tiempo del catecumenado. Celebrado este rito, el nombre del catecúmeno se inscribe en un libro que se custodiará en la Secretaría General del Obispado.
Con la celebración de la elección, los catecúmenos entran en “el tiempo de la purificación y de la iluminación”, tiempo de preparación última antes de la celebración de los sacramentos de la iniciación cristiana; Este período es, en la Tradición de la Iglesia, un tiempo de retiro espiritual y de conversión durante el tiempo de Cuaresma. Este rito de elección tiene lugar ordinariamente el primer domingo de Cuaresma con la entrega a los catecúmenos del Símbolo de la fe y del Padrenuestro
Para la celebración de hoy, seguro que estos catecúmenos serian felices de sentirse acogidos y acompañados por una buena representación de la Iglesia diocesana a la cual, de hecho, son incorporados y en la que compartirán la fe y seguirán recibiendo las catequesis de iniciación a los misterios del cristianismo que profesamos comunitariamente.
Agradezco de corazón, el esfuerzo de preparación que han hecho sus respectivas comunidades, sus catequistas y sacerdotes.
Recibid el saludo de vuestro hermano obispo,
+ Joan Piris Frígola, Obispo de Lleida