Costumbres y tradiciones:

 

Pinchar el "cup" (Recipiente generalmente de obra sobre el cual se pisa la uva y donde el mosto se transforma en vino)

Antes todo el mundo se hacía el vino, se pisava con los pies y se ponía el vino al cup. Por Sant Joan Degollat, todo el mundo iba a la bodega a pinchar el cup de vino, pero si Sant Joan algún año era en viernes no se podía hacer, puesto que si se hacía pasaría alguna desgracia.

 

Bodas

La chiquillería al salir los novios de la iglesia se ponían delante con una cuerda y no les dejaban pasar hasta que estos les daban una propina.
 
 
Bautizos
 
Después de un bautizo, para hacer participar de la alegría en todo el pueblo, se tiraban desde el balcón higos secos y almendras y se daba chocolate a los pequeños; más tarde eran peladillas y calderilla, y ahora se da una bolsita de peladillas a toda la chiquillería y conocidos. Los monaguillos que tocaban las campanas al acabar iban a casa del niño bautizado donde les daban «paga especial».
 
 
Cantar las "caramelles"
 
En Pascua, y al salir de misa mayor, los jóvenes ataviados con vestidos típicos, donde nunca faltaban la barretina y las alpargatas, pasaban por las calles a cantar las caramelles y a recoger la voluntad; con aquello que se recogía y añadiendo el que hiciera falta se hacía la pequeña excursión.
 
 
Primera Comunión
 
Los niños que hacían la Primera Comunión, antes comían todos juntos y aparte en una casa, y los familiares cada uno en casa suya. Hoy en día cada casa donde hay niños que han hecho la Primera Comunión hacen un banquete.
 
 
Fuego de san Juan y San Pedro
 
En las vísperas de las fiestas de san Juan y san Pedro, se recogían todos los restos de maderas, cartones..., y se sacaban en la calle haciendo con todo una buena hoguera. La chiquillería cercaba y jugaba con el fuego, y saltando cantaban:
Sant Pere, bon home;
Sant Joan, bon sant,
guardeu-nos de ronya
i de prendre mal.
 
 
Semana Santa
 
Para llamar a las funciones litúrgicas se pasaba por las calles tocando las matracas y carraus. Actualmente no se hace; se señala un horario y todo el mundo se fija con el reloj.
Antes se formaban unas patrullas de voluntarios que rondaban por el término municipal y por el pueblo mientras la gente era en los oficios religiosos, y evitar así que nadie de los otros pueblos les tocara nada. Como paga les daban tres o cuatro botellas de coñac.
Los Jueves y Viernes Santo se cantaba maitines u oficio de tinieblas, con las profecías, lamentaciones, cantadas; como también con el típico «matajudíos».
Cada domingo, como también el Viernes Santo, se hacía el vía crucis por las calles y a cada caída de Cristo, el que llevaba la cruz la dejaba en tierra y él se extendía encima la cruz durante unos momentos.
Por Jueves y Viernes Santo, como que no se podían tocar las campanas se pasaba con «carraus» y «matracas» por las calles haciendo mucho ruido y al mismo tiempo se cantaba.
El Domingo de Ramos, junto con las palmas, algunos bendecían chocolate, y dicen que si se comía mientras Cristo era al monumento preservaba de un accidente vascular cerebral.
 
 
Costumbres de carácter religioso
 
La titular de la parroquia es nuestra Mujer de la Asunción. Los dos patrones, san Antonio y san Roc, la festividad de los cuales se celebra el 17 de enero y el 16 de agosto. Antiguamente en estos días se celebraba las fiestas mayores, actualmente solo se celebra una, el segundo sábado de agosto. Por la tarde se hacía procesión por las calles del pueblo con la música, imágenes, pendones y reliquia del santo. Al acabar se cantaban los gozos del santo por el cual se celebraba la fiesta, mientras se hacía el besamanos de la reliquia. En estas procesiones, asistía casi todo el pueblo y muchos de sus hijos que venían a pasar las fiestas.
 
Rosario
 
Los días de cada día se rezaba todo el año durante los toques de misa. Los domingos de octubre, al apuntar el día, se hacía el rosario de la aurora por las calles. Rosario por los difuntos: se rezaba las tres partes en la casa del muerto, todo el mundo se sentaba por los pasillos o salas de la casa; al acabar los de la casa daban el porrón, porque todo el mundo hiciera un trago. Hoy se reza una parte en la iglesia.
 
Los gozos
 
Se cantaban cada domingo o siempre que alguien les pagaba para hacerlos cantar. Si al llegar al final del año había muchos que los querían hacer cantar y no les había tocado el turno en los domingos anteriores, dedicaban una tarde o tardes para cantar todos los que faltaban.

 

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Domingos y festivos.
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Catalán.