La capilla del IREL acogió el pasado 30 de mayo la fiesta de homenaje por la jubilación del profesor Jaume Sidera, en el marco de la Eucaristía de clausura del curso 2017/2018. Después de 20 años de impartir clases sobre el Antiguo Testamento en el IREL el Padre Jaume Sidera, de 88 años, se jubila.

El acto comenzó con una Misa de Acción de Gracias presidida por el Obispo Salvador que definió al Padre Sidera como "un experto bíblico y un hombre bueno". El Obispo pidió al Padre Sidera que "no se jubile nunca de la búsqueda de la verdad ni haga vacaciones de seguir a Jesucristo".

Después de la Eucaristía fue el turno de los agradecimientos al Padre Sidera. Mar Pérez, doctora en Biblia, destacó "el largo viaje del padre Sidera". Pérez resaltó los numerosos libros del claretiano y dijo que el claretiano "ama la palabra de Dios que es más penetrante que las espadas". "En este camino te acompaña la palabra de Dios y este viaje no las hecho solo, sino con Jesús", dijo.

Por su parte, el Padre Jaume Sidera recordó su infancia cuando "la misa era en latín, de espaldas y en voz baja". A continuación dio "gracias a Dios por haber podido hacer algo por él" y "pedir perdón por las veces que no ha estado a la altura". Y en la misma línea hizo un llamamiento a los asistentes a "no dejar de leer la palabra de Dios". Añadió que "Cristo no ha venido a eliminar el dolor, sino a llenarlo".

En el acto, también se leyó una carta del Doctor Armand Puig, rector del Ateneo Universitario San Paciano, que agradeció al padre Sidera haber iluminado la vida de muchas personas. En el mismo acto, alumnos de Bachillerato y de Master en Ciencias Religiosas explicaron lo que había significado para ellos cursar estudios en la IREL.