Hay muchas maneras de comenzar el curso. Una de ellas es invertir tiempo de silencio para que el Señor inspire nuestros caminos durante el curso escolar que ya ha comenzado. Por este motivo, los curas

de Alcarràs (P. Enrique y P. Xavier) y las Hijas de Jesús (M ª Dolores, Enri, Asunción y Ester-pre-postulante) hemos realizado un receso en el monasterio de Les Avellanes.

El retiro ha durado 24 horas. Comenzó la tarde del miércoles día 3 y finalizó el jueves 4, después de comer. La vocación personal y la Iglesia como "casa y escuela" de comunión han sido los temas sobre los que hemos reflexionado y que nos han ayudado a hacer camino durante los ratos de oración y los ratos que hemos compartido. La celebración de la Eucaristía con la comunidad marista y la oración mutua no han faltado.

Compartir la mesa y la conversación con los hermanos maristas nos ha enriquecido. Todo esto también forma parte de esta calidad espiritual que el señor obispo Joan Piris nos invita a buscar en su mensaje.

Estos días, los hermanos maristas han vendimiado y me han hecho pensar que este equipo de religiosas y sacerdotes somos la uva para aquellos que nos rodean.

P. Xavier Navarro