El sábado 21 de febrero, víspera del primer domingo de Cuaresma, en la Eucaristía de las 6 de la tarde, en la Catedral, y presidido por el obispo Joan, se ha celebrado el rito de la elección entregando a los catecúmenos el Símbolo de la Fe y el Padrenuestro.

El tiempo de Cuaresma será para ellos “el tiempo de la purificación y de la iluminación”, tiempo de preparación última antes de la celebración de los sacramentos de la iniciación cristiana; este periodo es, en la Tradición de la Iglesia, un tiempo de receso espiritual y de conversión.

La celebración de los tres sacramentos de la iniciación cristiana (Bautismo, Confirmación y Eucaristía) tendrá lugar el Cuarto Domingo de Pascua, también en la Catedral.

En nuestra Diócesis, durante el curso 2010-2011, se empezó a trabajar el objetivo de la Iniciación Cristiana, estudiando y madurando la posibilidad, entre otras acciones, de instaurar el Catecumenado de adultos (a partir de los 18 años) “con la colaboración de las parroquias de los candidatos”, cosa que quedó establecida el 21 de noviembre de 2011.

Conviene recordar que el Catecumenado “no es una simple exposición de dogmas y mandamientos, más bien una formación y aprendizaje de toda la vida cristiana debidamente alargado, a través de los cuales los discípulos se unen con su maestro” (AG 14).