El Movimiento de Profesionales Católicos de Lleida organizó el pasado 18 de abril una nueva tertulia con el título 'Espiritualidad y religión en momentos de incertidumbre' en el Café de Teatro de l'Escorxador. Participaron Jordi Capdevila, profesor del Colegio Episcopal y Margarida Llop, maestra del Centro Penitenciario de Ponent.

Jordi Capdevila destacó que "en este mundo de incertidumbre no sabemos si lo que vivimos es realidad o mentira". "Vivimos en una confluencia mental inherente a la condición humana", dijo. Para combatir esta situación Capdevila recalcó la importancia de "hacer silencio". "Cuando nosotros hablamos con nosotros mismos, es cuando salen las preguntas y las respuestas", dijo. En este sentido añadió que "el silencio no es el no ruido o la no respuesta. El silencio es un cruce de ruidos".

 

Destacó que el silencio "nos da miedo porque puede ser una anomalía, un tesoro, quizás una utopía".

Jordi Capdevila reiteró que "es imposible dar significado a nuestra existencia sin silencio". Y en la misma línea afirmó que "el sentido de la vida no está en el exterior". También destacó que "ahora huimos del silencio y el diálogo con nosotros mismos no existe". Continuó diciendo que el silencio "es inherente al hecho espiritual para encontrar respuestas en tiempos de incertidumbre". Y para concluir destacó que "el silencio es catártico, porque nos hace hacer preguntas, las respuestas de las cuales nos hacen avanzar" y por lo que reivindicó "hacer pedagogía del silencio".

Por su parte, Margarida Llop comenzó diciendo que "los momentos de incertidumbre o crisis pueden ser buenos, porque nos obligan a parar". "La crisis nos hace perder conciencia del entorno, las incertidumbres deben ayudarnos a salir adelante", explicó.

Llop destacó que a partir del siglo XX se habla de dos conceptos de religión, la religión pública y la religión privada. Además, reiteró que "tenemos que vivir nuestra fe en la Iglesia y capacitar para dialogar con la sociedad". Como retos de futuro, Lobo apostó por "un reagrupamiento cristiano, por una mejor presencia en el espacio público y la creación de un espacio cultural para compartir". Por último afirmó que "la incertidumbre ha venido para no irse", y añadió que "quien hace silencio encuentra a Dios".