El monje de Montserrat y director de la revista Documents d’Església, Bernabé Dalmau, ha protagonizado la conferencia Los congresos litúrgicos de Montserrat (1915, 1965 y 1990), una charlada-repaso en el marco del IV Congreso Litúrgico de Montserrat, que se ha celebrando este fin de semana.

Bernabé, que es el traductor de los documentos del Concilio Vaticano II y los principales textos de los pontificados de Juan Pablo II y de Benedicto XVI, ha recordado los inicios del primer congreso, que tuvo lugar al monasterio de Montserrat del 5 al 10 de julio de 1915, y ha repasado las conclusiones de las convocatorias posteriores. "La primera edición fue un punto de partida que ha tenido continuidad en el trabajo de muchas personas. Las sucesivas convocatorias han seguido su estela", ha explicado el religioso. "Conviene aprovechar las jornadas para no dejar morir la necesidad de potenciar la calidad de nuestra liturgia".

La aplicación del I Congreso Litúrgico de Montserrat comportó la práctica de una liturgia fiel a la romanidad, el fomento de la espiritualidad y la piedad litúrgica y sacramental y la propuesta de una participación activa de los fieles en la acción litúrgica. "Lluís Carreras propuso un congreso de liturgia en Montserrat para fomentar el movimiento litúrgico. Se consiguió el apoyo del clero y se organizó en Barcelona una primera junta organizadora", ha relatado. "El congreso reunió más de 2.000 personas y no careció ninguno de los personajes de la época. había los obispos de la Tarraconense, y figuras como Puig y Cadafalch, Gaudí y Lluís Millet".

Posteriormente, en el II Congreso se confirmó la línea iniciada en 1915, con la renovación litúrgica propuesta por el Concilio Vaticano II, especialmente en la Constitución Sacrosanctum Concilium.

El III Congreso Litúrgico de Montserrat, setenta y cinco años después del primero, estuvo centrado en dos temas: la liturgia, el corazón de la vida cristiana y el balance y perspectivas de la reforma litúrgica conciliar en Cataluña. Poco antes de aquella celebración, en 1986, se fundó el Instituto Superior de Liturgia de Barcelona, dentro de la Facultad de Teología de Cataluña (FTC).

La música litúrgica



Durante la mañana del viernes se celebraron diferentes presentaciones y actos entre los cuales destaca la charla a cargo del rector de la iglesia de Sant Feliu de Girona, Joan Baburés, que habló de la música litúrgica.

El prelado aseguró que "ahora se canta más y mejor", si bien ha lamentado que no en todas partes se dan estas condiciones.

Por otro lado, recordó que el Concilio Vaticano II remarca el canto como parte integrando de la liturgia y continuó con la afirmación siguiente: "La música ha sido siempre considerada un don divino".

"Desde los primeros siglos, la práctica litúrgica incluye el canto. No es hasta después de 1.000 años, con las misas privadas, que se empiezan a permitir celebraciones sin canto. No tenemos que olvidar que la primera misa fue cantada. Canto y música son un instrumento de celebración. El canto intenta acercar los fieles a la celebración, a la vegada que la celebración a los fieles", sentenció.