Mn. Gerard Soler, delegado diocesano de Liturgia y Espiritualidad, dedica su colaboración semanal a hablarnos del Adviento.

Navidad

Este es el día de la salvación; esta es la noche de la reconciliación, la noche de los mansos y humildes; este es el día del perdón y de la reconciliación; este es el día de la venida de Dios junto a los pecadores; este es el día en el cual se hace pobre por nosotros el Rico.

San Efrén, en el Elogio de la Fiesta de Navidad.

Pasados innumerables siglos desde de la creación del mundo, cuando en el principio Dios creó el cielo y la tierra y formó al hombre a su imagen; después también de muchos siglos, desde que el Altísimo pusiera su arco en las nubes tras el diluvio como signo de alianza y de paz; veintiún siglos después de la emigración de Abrahán, nuestro padre en la fe, de Ur de Caldea; trece siglos después de la salida del pueblo de Israel de Egipto bajo la guía de Moisés; cerca de mil años después de que David fue ungido como rey, en la semana sesenta y cinco según la profecía de Daniel; en la Olimpíada ciento noventa y cuatro, el año setecientos cincuenta y dos de la fundación de la Urbe, el año cuarenta y dos del imperio de César Octavio Augusto; estando todo el orbe en paz, Jesucristo, Dios eterno e Hijo del eterno Padre, queriendo consagrar el mundo con su piadosísima venida, concebido del Espíritu Santo, nueve meses después de su concepción, nace en Belén de Judea, hecho hombre, de María Virgen: la Natividad de nuestro Señor Jesucristo según la carne.

Martirologio romano. Elogio de la Navidad del Señor