El Solerás vivió un día de fiesta grande el martes, 4 de agosto, con motivo de la festividad de San Domingo, patrón de la población conjuntamente con San Gregorio.

Una misa, presidida por el rector de la parroquia, el P. Ángel Alegre, la veneración de la reliquia y la bendición de la coca centraron la celebración religiosa.

Cómo es tradición, los concejales del Ayuntamiento portaron la coca que depositaron en el presbiterio para su bendición, mientras ocupaban los primeros bancos de la iglesia.

Al finalizar la ceremonia, los asistentes pudieron llevarse para su casa un pedazo grande de coca.

Tenéis más imágenes en este enlace. (Fotos: Manel Marsan)