El Auditorio Enric Granados acogió el domingo 10 de enero la clausura del Ciclo de Navidad 2015 con la entrega de los premios de los concursos de pesebres. El obispo Salvador, el alcalde, Àngel Ros, y el presidente de la Agrupación Ilerdense de Pesebristas, Àngel León, presidieron este acto.

Más de 200 personas han concursado este año a los diferentes concursos que ha convocado la agrupación. Se entregaron de los premios y galardones de las diferentes categorías. Una de las personas que recogió un premio fue el maestro Virgilio del Olmo, autor del pesebre de la iglesia de Santo Pau de la Mariola que ganó el primer premio especial por su monumentalidad puesto que está formado por 300 figuras.   

También se quiso reconocer a diferentes personas durante este acto como la entrega del título de Maestro pesebrista a José Antonio Ferrer, así como galardonar a Magdalena Ibars, autora de pesebres y grupos escutóricos navideños en terracota, a Juli Daura, por sus motivos navideños en porexpan, a Pep Tort, hasta hace poco director del Consorcio del Turó de la Seu Vella y al Grupo TOAR por la representación de “Els Pastorets” y la estrecha colaboración con la Agrupación de Pesebrista, en su 60º Aniversario.

Àngel Ros se refirió a la base cristiana de la Navidad y agradeció el trabajo que hacen las entidades de voluntariado de Lleida que trabajan en torno a la Iglesia asegurando que “el Banco de Alimentos, la Fundación Jericó, Arrels o Càritas son manifestaciones exteriores de la Navidad vinculadas a la atención con los más débiles”. El alcalde también tuvo palabras por las Hermanitas de los pobres esperando poderlas reencontrar el próximo año en este mismo acto, haciendo referencia al posible cierre de la residencia Juana Jugan de Gualda.

El acto se cerró con una cantata de villancicos a cargo de la Coral Infantil Escuela Mitjana de Lleida, el conjunto de voces Amunt i a Ball, los Centros Musicales Dalcroze de Corbins y Lleida y la coral infantil Almenar, acompañadas al piano por Maria del Mar Jové y Gemma Naranjo. Bajo las batutas de Ana Pachón, Joana Cebolla y Maria Altadill y con Montserrat Virgilio como solista y Llubí Casas, como rapsoda.