Ramón Prat, administrador diocesano del Obispado de Lleida, ha dirigido una carta a los hermanos en la fe, tal como ha hecho los últimos años, cada mes de septiembre, desde su responsabilidad de vicario general. En esta ocasión, ante las circunstancias del relevo al frente del Obispado y a la espera de la llegada del obispo Salvador, la anticipa y lo hace como administrador diocesano.

En su carta, que podéis leer en el documento adjunto, Mn. Prat agradece “de todo corazón el servicio generoso y las iniciativas pastorales innovadoras del obispo Joan, a lo largo de los siete años de su ministerio episcopal en Lleida”.

El administrador diocesano explica que el obispo Joan ya ha entregado al obispo Salvador el informe sobre el estado actual de la diócesis, que “recoge los retos, los signos de esperanza y las prioridades actuales del proyecto diocesano” del Obispado de Lleida, fruto del trabajo realizado en la última asamblea diocesana.

Mn. Prat explica el contenido del informe y su elaboración, antes de subrayar tres aspectos. Primero, hacer un agradecimiento a la tarea realizada por tanta gente, desde el Concilio Vaticano II hasta la actualidad, que ha permitido “que la vida en las comunidades parroquiales y las unidades pastorales hermanadas se viva en un clima sencillo de normalidad, serenidad y confianza”.

En segundo lugar, el administrador diocesano pide responsabilidad para vivir el presente, bajo la tutela del obispo Salvador, para estar atentos a las personas y seguir “edificando una Iglesia sinodal, samaritana, espiritual y encarnada”.

Mn. Ramón Prat también ve con esperanza un futuro, que ya es aquí, al estar iluminados por los escritos pastorales del Papa Francisco, Evangelii Gaudium y Laudato Sí.