
El Mn. Adrià Burca bendijo el pasado domingo 7 de abril en la celebración de la eucaristía de la Granadella la Virgen dormida y el sepulcro del Cristo Yacente que han sido restaurados recientemente.
Juan Antonio Ferrer y Lluís Capdevila han sido los artesanos que han restaurado esta imagen y el sepulcro, dos piezas muy queridas por los vecinos y vecinas de la Granadella. Concretamente, del sepulcro eliminaron los restos de pintura vieja y forraron la madera con pan de oro y pátinas. Esta pieza está formada de dos partes, el sepulcro propiamente dicho y el tabernáculo que hace de peana. Esta pieza tiene un protagonismo especial el Viernes Santo durante el Desclavament, ya que es donde sitúan Cristo articulado para poder sacarlo en procesión.
En cuanto a la Virgen dormida que se venera el 15 de agosto. Los restauradores limpiarla, recuperando la policromía y restaurado el oro bruñido. También se reconstruyeron los dedos de los pies que estaban rotos. Esta escultura data de los años 40.