150 Años de la Academia Mariana
La figura de María de Nazaret ha tenido en los dos milenios de cristianismo un papel primordial en la fe cristiana. Hoy en día sigue siendo referente humano y cristiano para nuestro tiempo.
Hay que repetir muchas veces que para los cristianos la Madre de Dios no es una "imagen", ni un recuerdo, ni un símbolo, sino una persona viva y real que, por un don especial de Dios, comenzó su vida en una situación de amistad con Dios, de pureza, de bondad de corazón, que los demás humanos no tenemos. Ella no vive del pasado, de una herencia corrompida ("pecado original"), sino del futuro, de una etapa de posibilidades, de bendición de Dios a la que todos estamos llamados gracias a la obra redentora de Jesucristo (Ef 1,3-11).
Acción-don especial-de Dios pero, como todos, también a María le pide respuesta y confianza y fidelidad puestas a prueba en tantas circunstancias ... Ella no cesa de "crecer" en una "peregrinación de la fe" que la llevará hasta el pie de la cruz, como describe el evangelista Lucas anotando las reacciones de María. "Nunca en nuestra historia tanto dependió del consentimiento de la criatura humana" (cfr. Tertio Millennio adveniente, n º 2). Para la ofrenda libre de sí misma, Dios vino a habitar entre nosotros convirtiéndose para nosotros en fuente de "gracia y de verdad" (Jn 1,17). Y aquella que se había proclamado "esclava del Señor", comienza enseguida a vivir la fe subiendo rápidamente hacia la montaña a casa de Isabel y demostrando así ser servidora de aquellos que Dios ama.
Hay que situar en este marco las extraordinarias celebraciones que nos disponemos a vivir en Lleida con motivo de los 150 años de la Pontificia y Real Academia Bibliográfico-Mariana. Lo haremos con un extraordinario Certamen Literario en honor de la Virgen Blanca de la Academia, Patrona de la ciudad de Lleida, el próximo domingo 7 de octubre, y con un Simposio de alto nivel los días 19, 20 y 21 de octubre en el que se tratarán aspectos históricos, teológicos y culturales de la figura de María de Nazaret. Queremos hacer un esfuerzo significativo para integrarlo todo en el proyecto global de nuestra Diócesis de Lleida, concretamente en la iniciación cristiana y en la presencia de Iglesia en la sociedad actual.
Es pura providencia que coincida esta celebración el mismo día que, en Roma, será declarado Doctor de la Iglesia san Juan de Ávila y se abrirá solemnemente el Sínodo mundial sobre la Nueva Evangelización para la transmisión de la fe cristiana, conmemorando el 50 aniversario del Concilio Vaticano II.
Ojalá que el Señor quiera bendecir abundantemente estas iniciativas de nuestra Iglesia Particular así como aquellas de la Iglesia Universal que pueden ser un hito muy importante en el camino de la Nueva Evangelización.
Recibid el saludo de vuestro hermano obispo,
+ Joan Piris Frígola, Obispo de Lleida