Autor: Congregación de Marta y María

Nuestra Amada Congregación Marta y María surge, en la Iglesia y para la Iglesia, impulsada por la fuerza carismática del Espíritu Santo. Al inicio surge como un grupo de chicas catequistas para ayudar en las Parroquias por falta de vocaciones Sacerdotales. no se pensaba en una Congregación si no en apóstoles del mismo ambiente, basado en lo que dijo su Santidad Pio XII “formar apóstoles del propio ambiente". Con el tiempo se vio que Dios quería algo más que catequistas.

La docilidad de nuestros queridos fundadores los llevó a hacer algo más, una Congregación y así, a través de la Sagrada escritura Nuestro Padre Fundador, en diálogo con Nuestra Madre Fundadora Angela E. Sánchez, ponen la mirada en Betania los amigos de Jesús dando así, el nombre de “Marta y María”. Dio inicio el 6 de enero de 1979. Se consagran las 6 primeras hermanas, en ese entonces todavía como grupo apostólico Marta y María. Dios bendijo esta incipiente obra con una abundante lluvia de vocaciones, confirmando su amor infinito para Nuestra congregación.

La Congregación desde entonces fue creciendo y actualmente estamos en tres continentes: América (Central y Sur); Europa y África, cubriendo 21 países: Guatemala, España, Venezuela, Italia, Argentina, Honduras, Etiopía, Cuba, Lituania, Holanda, Mozambique, Francia, Costa Rica, Panamá, Ecuador, Perú, Uruguay, Canadá, Chile y Colombia.

Nuestra Congregación es de derecho Pontificio por la gracia de Dios desde Julio de 2019, aprobada por su Santidad Francisco.

Nuestro apostolado abarca una amplia gama de servicios, desde atención de Hogares de Niños/as; residencias de personas mayores; Niñas especiales con discapacidad Física y Psíquica; centros educativos, parroquias, prestando también servicios en Nunciaturas y Conferencias Episcopales, casas Sacerdotales y Obispados. Haciendo realidad con nuestras vidas el art. 24 de nuestras constituciones que expresa: "Las hermanas de la congregación Marta y María deben tener la disponibilidad para hacer las veces de Marta y la laboriosidad sirviendo a Jesús en nuestros hermanos preferentemente en los más necesitados y a la vez hacer las veces de María, ejemplo de oración y contemplación, es decir: hacer de la casa un Betania donde Jesús tenga su morada”.

Nuestra amada congregación continúa en marcha, contando con numerosas vocaciones gracias a la respuesta generosa de las señoritas que aún desean entregarse al servicio de Dios. En la actualidad Nuestra Congregación está bajo la guía de Madre María Rutilia Carrera Morales Superiora General, juntamente con su Consejo.

Nuestro Carisma es: VER EL ROSTRO DE JESUS EN EL MÁS NECESITADO EN EL CUERPO O EL ALMA. ATENDIENDOLE CON LAS MANOS DE MARTA Y EL CORAZON DE MARIA.

Nuestro lema: AMOR E INMOLACION.

En nuestra Congregación tenemos varias etapas de formación, para conocer mas a fondo la espiritualidad de la Congregación y se distingue por un largo caminar iniciando con el aspirantado, el postulantado y el noviciado. “El que permanece en mí y yo en él da mucho fruto porque sin mí no podéis hacer nada” (Juan. 15,15)

La vida religiosa es un abandono total a Jesús que nos llama día a día, es donde la profesa ya no se pertenece si no solamente a Dios. Dirige su alma en una sola dirección que es la unión con el Amado que le espera en el más allá, Por ello tenemos nuestras hermanas María de Betania que dedicadas directamente a la oración son nuestro para rayos en nuestra vida congregacional. También contamos con la presencia de los Sacerdotes Misioneros de Betania y laicos Consagrados.

Somos la gran familia Misionera de Betania que, queremos ser los anunciadores del mensaje de salvación a través de la misión encomendada. Sirviendo con alegría y entrega.

¡¡Todo para honra y gloria de nuestro buen Dios!!!!