
El próximo 12 de octubre se cumplirán 160 años de la fundación, en 1862, de la Academia Mariana por parte de mosén Josep Maria Escolà i Cugat, con la colaboración de Lluís Roca Florejachs y Josep Mensa. Además de la institución, como monumento a la Inmaculada Concepción de María, se promovió la construcción del Palacio de María. Las obras se iniciaron en 1869 y se fueron completando en fases sucesivas. La fachada clássica enlaza los tres cuerpos que conforman el edificio, construido sobre los cimientos de un convento mercedario del siglo XIII. Una doble escalinata estilo imperio da acceso al oratorio neogótico florentino, inaugurado en 1871. El oratorio, junto al paranimfo modernista y el teatro de arte decó son espacios del patrimonio artístico de la ciudad de Lleida poco conocidos por el conjunto de la ciudadanía.
Los actos de conmemoración del 160 aniversario empezarán el miércoles 12 de octubre con una Misa solemne a las 12 del mediodía en el Oratorio de la Virgen Blanca de la Academia, patrona de Lleida, presidida por el obispo Salvador. Durante la celebración se rezará por los socios difuntos de la Academia, especialmente por los traspasados durante este último año. El Petit Cor de la Catedral solemnizará la celebración. Después de la misa se hará un acto de recuerdo a los antiguos directores de la Academia Mariana y se entregará el título de director honorario al doctor Joan Viñas i Salas, en reconocimiento a su labor. También se distinguirá el padre claretiano Jaume Sidera i Palana por su aportación a la Junta de la Academia.
Con el lema “Todo para María” la Academia Mariana ha procurado cumplir su función de unir fe cristiana y cultura ensalzando a la Virgen a través de la literatura y las bellas artes, especialmente con la convocatoria de los certámenes marianos nacidos en la celebración de su primer año de vida. Concebida como a santuario mariano, la Academia Mariana ha sido y es testigo del itinerario de fe de la Iglesia de Lleida desde su fundación.
