El sacerdote José Vidal Talens impartió el pasado 25 de septiembre una conferencia sobre la renovación de las parroquias en la Casa de la Iglesia de Lleida. Por la mañana el sacerdote Vidal Talens también ofreció una sesión de formación para sacerdotes de la diócesis. Vidal aseguró que nos encontramos en una época de cambio y que "todo cristiano tiene que ser misionero". Y este cambio de época pide "una conversión pastoral, como dice el Papa Francisco en la Evangelii Gaudium". "La misión de un creyente es hacer discípulos de Jesús", recalcó.

 

En este sentido dijo que "los cristianos son minoría pero tenemos que ser minoría significativa". "La Iglesia existe hoy para evangelizar y si no hace esto, no estamos haciendo la misión de la Iglesia". Destacó que el "católico no puede ser un derrotista ni un amargado". "Tenemos que despertar vocaciones laicales" y "necesitamos una cultura de invitar". Apostó por "actividades reclamo". Uno de estos reclamos para acercar gente a las parroquias es "el voluntariado en acciones caritativas y sociales en entidades como Cáritas".

 

En relación con la catequesis explicó que "tiene que ser experimental e iniciática". "Toda formación tiene que hablar al corazón de las personas", dijo. Vidal Talens añadió que con los alejados hay que dejar los sacramentos y apostar por el silencio. Respecto a la figura del rector explicó que "el liderazgo del rector tiene que ser despertar vocaciones y también valorar las personas que solo rezan". "Tenemos que despertar vocaciones laicales a la evangelización". Pero añadió que "antes de dar respuestas, el católico debe escuchar".

 

Para caminar hacia "parroquias vivas" el ponente hizo varias propuestas: "convocar una y otra vez el Primer Anuncio; formar el discipulado en pequeños grupos para llegar a ser discípulos misioneros; potenciar la pluralidad de servicios ministerios; crear una comunidad de comunidades y apostar por la oración y adoración y la celebración de Dios, del Señor como encuentro de creyentes".

 

Además, el ponente defendió "una Iglesia en salida, con las puertas abiertas". En este sentido propuso abrir los templos para hacer plegaria. Y añadió que "hay que salir al encuentro de los que se han alejado de Jesús o incluso sienten rechazo". "Salgamos a ofrecer a todos la vida", concluyó.