[29-03-24] La procesón del Silencio recorrió ayer por la noche, com cada Jueves Santo, las calles del Centro Histórico de Lleida en medio de una gran solemnidad y respeto. La imagen del Cristo de la Agonía y de la Virgen de la Piedad salieron  puntualmente a las doce de la noche por la puerta lateral de la iglesia románica de Sant Martí. El silencio de los fieles acompañaba la maniobra de los costaleros para hacer salir el Cristo por un espacio muy ajustado. Una vez fuera, una saeta saludó la imagen de Jesús crucificado, que fue recorriendo las calles Sant Martí, Jaume I, plaza dels Gramàtics y Cavallers, para reotrnar de nuevo a la antigua iglesia de Sant Martí.

El obispo Salvador, acompañado de las autoritades locales, siguió toda la procesión al lado de un numeroso público hasta entrada la madrugada, cuando la Agrupación de Tambores y Bombos de la Cofradíia de la Casa de Aragón protagonizó la 'Rompida del Silencio' con sus instrumentos de percusión.