La visita ad limina ha seguido, este miércoles día 12 de enero, con la celebración eucarística en la Basílica Pontificia de Santa Maria la Mayor. La misa ha sido presidida por el cardenal Antonio Cañizares, arzobispo de Valencia, y celebrada en el altar de Santa Maria, Salus Populi Romani, que se atribuye a la época de los primeros cristianos. El obispo de Lleida, Salvador Giménez, ha participado en la eucaristía. Mons. Cañizares se ha mostrado emocionado por «celebrar en esta basílica de Santa Maria, madre de Jesús y madre de la Iglesia». La homilía se ha centrado sobre el papel maternal de la Virgen María: «El hijo de Dios se ha hecho hombre en ella por obra y gracia del Espíritu Santo. Nosotros, hoy, somos dispensadores de su gracia».

 

En el día de hoy los obispos de las tres provincias eclesiásticas de Valencia, Barcelona y Tarragona se han reunido en la sede de la Congregación del Clero, donde han mantenido un primer encuentro con la Congregación para la Educación Católica, donde el cardenal Antonio Cañizares, como obispo relator, ha indicado que «se han expuesto los problemas de la educación en España y también en Europa, señalando que no basta con instruir, sino educar en el sentido de la vida; de la implantación de la LOMLOE y la necesidad de una alternativa de enseñanza que se trabaje desde la unidad; y de la relevancia que tienen las escuelas católicas. Y se ha expuesto la importancia de fomentar las universidades católicas.»

 

Más tarde, los obispos han asistido a la Congregación para el Clero, que es la responsable de supervisar los asuntos relativos a los diáconos que no pertenecen a órdenes religiosos. Se ha hablado de cómo nos responsabilizamos todos de la vida de los propios presbíteros que sirven en el pueblo de Dios. Esta congregación se encarga de la legislación que rige los consejos presbiterales y otras organizaciones de sacerdotes.

 

A continuación han asistido a la Congregación por el Culto Divino, que se preocupa de todos los aspectos celebrativos, litúrgicos, de las parroquias. Después de un diálogo se ha hecho un ejercicio de sinodalidad entre todos el obispos.

 

Por último, la jornada ha acabado, por la tarde, con una reunión al Dicasterio para la Comunicación.

 

«El Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales está involucrado en cuestiones relativas a los medios de comunicación, de forma que, también por este medio, el progreso humano y el mensaje evangélico pueden beneficiar la civilización y la cultura». La tarea principal de este Consejo es fomentar y apoyar, de una manera oportuna y adecuada, a la acción de la Iglesia y sus miembros en las múltiples formas de la comunicación social. Se ha explicado cómo comunicar y como comunica hoy la Iglesia.