La Red de Entidades de Acción Sociocaritativa del Obispado de Lleida ha organizado este sábado 14 de noviembre una mesa de experiencias con motivo de la Cuarta Jornada Mundial de los Pobres. La iniciativa ha tenido lugar de forma telemática a través de la plataforma Zoom. La sesión ha empezado con una plegaria y una interpretación musical a cargo del padre mercedario Padre Nacho. Después se ha leído un extracto del Mensaje del Santo Padre.

 

A continuación, han participado tres personas vinculadas de diferentes realidades de la Red de Entidades Sociocaritativa del Obispado de Lleida.
 

 

Anna Krutter, voluntaria de Cáritas en el proyecto de atención a personas temporeras este verano ha explicado que "su tarea fue intentar aportar un grano de arena para que las personas atendidas vieran que alguien los miraba diferente para que se sintieran mínimamente acogidas". "Lo hice para dar respuesta a una realidad sobrecogedora. Teníamos hermanos mojándose en la calle y nosotros nos lo mirábamos desde casa". Anna ha explicado que fue una "montaña rusa de emociones; hemos vivido momentos de alegría, resignación y mucho dolor". A continuación, destacó que “las entidades tenemos que reclamar justicia”, “¿Hasta cuando tenemos que poner parches a un sistema que no funciona? ".
 

 

A continuación, Javier Garcia, un expreso que ha sido acogido en un piso de acogida de los Padres Mercedarios explicó que "después de tres años en prisión conseguí salir con permisos gracias al piso de acogida de los padres mercedarios". "Veía mi futuro muy oscuro, pero el piso me ayuda mucho en la reinserción, es un pequeño oasis que nos ayuda a sentirnos libres y a dar los primeros pasos". "Ahora hace seis meses que salí en libertad, tengo trabajo y he rehecho mi vida".

 

Por su parte, Anna Clotet, educadora de las Obras Sociales Maristas, explicó su experiencia con las familias vulnerables durante el confinamiento. Clotet explicó que "tenemos proyectos para jóvenes y para sus familias, para que tengan las mismas oportunidades que el resto”. Anna destacó que "la pandemia agravó muchas situaciones de vulnerabilidad". "Muchas familias se han quedado confinadas en pisos pequeños dificultando su proceso. "Además, tenemos que añadir la brecha digital. La tarea de los educadores ha sido dar estrategias para hacernos próximos en situaciones de miedo". Clotet valoró muy positivamente los casales de verano que se pudieron celebrar con relativa normalidad.

 

Para cerrar el encuentro virtual el Obispo Salvador ha agradecido a todas las entidades la tarea que llevan a cabo. Destacó que "la Iglesia siempre lo ha tenido claro o nos amamos los unos a los otros o nuestra fe queda incompleta"

 

En el siguiente enlace podéis ver el video del encuentro.

 

https://youtu.be/DzqI38HEdcY