Laic / Laica
Martir / Beat / Sant

 Nace en Púmar (Orense) el 22 de enero de1868, siendo bautizado el día siguiente.

Es el único hijo de Blas Prieto Garrido y de Luisa Rodríguez de Dios. Debían ser una familia humilde pues emigraron a Argentina. Cuando Benito tenía 7 años muere su madre; y su padre Blas ingresó como fraile en el Convento-Seminario Francisco de Cehegín (Murcia), llevando consigo a su hijo Benito.

En este Centro realizó el niño sus estudios elementales y el Bachillerato, de ahí su sólida formación humanística y religiosa. Una vez realizados sus estudios de enseñanza media se trasladó a Santiago de Compostela para cursar la carrera de Derecho realizando más tarde las oposiciones al cuerpo de Registradores de la Propiedad. En 1894 contrae matrimonio en Maceda con la virtuosa joven Amalia Vidal Rodríguez. Ambos se dedican a la educación cristiana de sus seis hijos. Se conserva una carta de Benito a sus hijos José y Julio animándoles a recibir los Sacramentos de la Reconciliación y de la Eucaristía en la fiesta de Todos los Santos. A su hijo José le da unos motivos evangélicos: “Ánimo, hijo mío, que nada te importe el “qué dirán”, que el verdadero valor se demuestra entregándose de lleno a nuestro Dios y Señor Jesucristo que nos abre sus brazos y Corazón” ... y más adelante añade: “Acuérdate de las palabras de Jesús que prometía: al que me confiese delante de los hombres yo le confesaré y reconoceré delante de mi Padre Celestial en la otra vida”... ¿No le tuvieron que confesar los héroes del Cristianismo?. Pues nosotros sigamos sus huellas y hagámoslo de igual modo” (11 nov. 1911).

Si esos eran sus sentimientos y consejos a sus hijos, podemos adivinar cuáles serían sus sentimientos aquel 25 de agosto de 1936.

Al morir su esposa en Las Palmas de Gran Canaria, regresa a la Península y ejerce su profesión en Lleida desde 1934 a 1936. Don Benito fue apresado el mismo día 20 de julio de 1936 en la calle, al regresar de ver a su hijo José.

El 25 de Agosto de 1936, sobre las 10 de la mañana, una horda de milicianos venidos de Barcelona exigieron una saca de presos. Entre los 21 figuraban 7 sacerdotes y el Vicario General y Deán Dn. Rafael García Segura. Benito era también uno de los escogidos. Su hijo Julio también estaba entre el grupo de mártires el mismo día.

Fue enterrado en la fosa de los mártires del cementerio de Lleida.