La Parroquia de Santa Teresa Jornet de Cappont acogerá, este domingo, una eucaristía organizada por la Pastoral Obrera de Lleida con motivo del 1 de mayo. La misa tendrá lugar a las 10 horas y estará presidida por el obispo de Lleida, Salvador Giménez.
 

Hace unos 50 años que la Pastoral Obrera de Lleida celebra una Eucaristía con motivo del Día del Trabajo, el Primero de Mayo.

Como cada año el Secretariado interdiocesano de Pastoral Obrera de Cataluña ha redactado el Manifiesto del 1 de Mayo. Este año el manifiesto denuncia que las mujeres, los jóvenes y los inmigrantes son, según el Informe Foessa, los colectivos que más sufren actualmente las consecuencias de la crisis del 2008, de la pandemia, de la inflación y de las guerras. La desigualdad social crece, mientras el estado del bienestar recula.

Un sistema que estaba lejos de garantizar el bienestar al 100% de la población y que reposa sobre la explotación del Sur global. Trabajar hoy ya no es garantía de salir de la pobreza. Las entidades firmantes del manifiesto han querido valorar este año la situación de las personas que hacen trabajos de cura y de atención a personas vulnerables.

Una tarea que durante la pandemia fue considerada esencial, pero que a pesar de esto continúa desarrollándose en condiciones de trabajo muy precarias. El documento lo subscriben movimientos y colectivos obreros cristianos de Cataluña y Baleares (ACO, GOAC, JOC y MIJAC, Curas obreros, Religiosos y religiosas en barrios obreros y populares) y Delegaciones de Pastoral Obrera de las Diócesis de Catalunya.

El manifiesto acaba estos seis compromisos por parte de la Pastoral Obrera de Cataluña:

• Denunciar aquellas actuaciones que causan abuso y precariedad laboral para los hombres y mujeres trabajadores.

• Continuar estando presentes y apoyando a sindicatos, partidos, entidades y organizaciones que tengan como objetivo transformar las causas de la desigualdad y la explotación laboral.

• Promover servicios públicos de calidad para las personas más vulnerables.
• Acompañar las mujeres y hombres que forman parte de las "periferias laborales", en palabras del papa Francisco.

• Promover que las contrataciones que se hagan en las instituciones eclesiales y en los domicilios de los cristianos sean respetuosas con el trabajo digno.

• Continuar rogando porque el Espíritu nos haga más comprometidos, creativos y libres para trabajar por la dignidad de todas las personas.