La Catedral de Lleida se ha llenado de fieles este 12 de abril, Martes Santo, para participar en la Misa Crismal.

 

El Obispo de Lleida, Salvador Giménez, ha presidido la celebración en la cual ha pedido a los fieles "poner siempre los ojos en el Cristo" y ser "personas que den consuelo a los otros". El Obispo Salvador ha tenido también palabras de recuerdo por los sacerdotes que han traspasado el último año. También ha hecho un llamamiento por la paz en Ucrania y ha recordado la acogida de la diócesis de Lleida a los refugiados de este país. Unos sesenta curas de la diócesis han participado en la Misa Crismal en la cual han renovado su compromiso sacerdotal.

 

Cómo establece la tradición el Obispo Salvador consagró el crisma y bendijo los aceites para los catecúmenos y para los enfermos. Este año el aceite ha sido dado por la cooperativa de la Virgen de Loreto de Llardecans.

 

Antes de la Misa Crismal ha tenido lugar la Jornada Sacerdotal. El encuentro ha empezado con una plegaria y a continuación el sacerdote ucraniano de la diócesis, Taras Kogut, ha explicado a los presentes la situación de su país, a raíz del ataque de Rusia. La jornada ha acabado con una comida de hermandad en la Academia Mariana.