La comunidad claretiana de Lleida y los feligreses de la parroquia Sant Antoni M. Claret de esta ciudad, recordaron al P. Josep M. Viñas, en la misa parroquial de las 7 de la tarde, del miércoles 13 de octubre.
 

El Eucarista ha sido presidida por su compañero P. Jaume Sidera y han concelebrado los otros claretianos de la comunidad. Las lecturas de la liturgia, de marcado cariz misionero, “Ahora bien, como podrán invocarlo, si no creen? Y como creerán en él, si no han sentido hablar? Y como sentirán hablar, si nadie lo anuncia? Y quien lo podrá anunciar, si nadie es enviado?”, “Vais por todo el mundo y anunciáis la buena nueva del evangelio a toda la creación”, han invitado a poner de manifiesto la faceta misionera del P. Viñas.

 

Efectivamente, el P. Sidera ha recordado al P. Viñas como un misionero tanto por los más de 40 años de intensa vida misionera en Guinea Ecuatorial, como en otras tareas pastorales. Siempre dio testigo de su fe y que nunca dejó de predicar la Buena Nueva del Evangelio, a pesar de los tiempos difíciles de la dictadura de Macias en aquel país. Se enfrentó sin aspavientos pero con firmeza, lo cual le comportó ser encarcelado durante unos días, y más tarde fue expulsado de la isla de Bioko (antigua Fernando Poo).

 

En el año 1999 fue adscrito a la comunidad de Lleida, donde estuvo hasta el 2015 cuando se incorporó a la comunidad asistencial de Barcelona, donde pasó sus últimos años. En la parroquia Claret de Lleida creó el Movimiento de “Vida Ascendente”.
 

El P. Josep M. murió el pasado 14 de septiembre, cuando acababa de cumplir 75 años de vida consagrada. Dichosamente ha dejado un escrito muy interesante: “Mis recuerdos de Guinea”, redactados en un estilo ágil y en un catalán perfecto después de 40 años de ausencia. Estos recuerdos son un testigo de primera mano para conocer y seguir la historia de la Guinea Ecuatorial desde la simple colonia española, hasta ser provincia y finalmente estado independiente.
 

En la eucaristía se ha rogado por la Iglesia de Guinea y porque su muerte sea semilla de vocaciones consagradas tanto en aquel país como en la Iglesia diocesana de Lleida.
 

A la salida se ha entregado un recordatorio con una fotografía del P. Viñas y algunos datos de su biografía.
 

Conxita López Torres.