Buenos días, ¿Qué tal estáis?


El servicio de Hospitalización Domiciliaria sigue siendo muy fiel y, diariamente, intenta que mi salud vuelva a la máxima normalidad posible.

Como de costumbre, cuesta la recuperación… Pero a pesar de hacer vida totalmente Hospitalaria, es maravilloso seguir aquí, bajo el cuidado de mamá, del simpático humor de Imma, de la cercanía de todos los de casa…  y en nuestro ambiente habitual.


Son días difíciles; al tomar más medicación y, endovenosa, han aumentado los efectos secundarios más frecuentes que ya conocéis. Además, hay otros que también se alteran en estos casos como, la impaciencia…


De todas formas, también queda mucho tiempo para disfrutar de grandes momentos; dejadme que os comparta alguno:


El sábado día 28, el Obispo de Lleida, Joan Piris, estuvo de visita pastoral aquí en Almacelles. Se reunió con los distintos grupos que participan en la Parroquia, dedicó parte de su tiempo a los ancianos en las residencias para los más mayores y estuvo en algunos domicilios reconfortando a los enfermos. ¡Vino aquí a casa y me alegró volver a verlo… no podía ocultar la alegría que seguía reflejando su rostro después de mi Compromiso Misionero! Continúa pensando en aquella gran Celebración y en todo lo que supuso…


¡Y, qué casualidad: ese mismo sábado, hacía 11 años que él había sido ordenado Obispo! Precisamente, el día que salió publicada en un Semanario de Información y de Cultura Religiosa, “Catalunya Cristiana”, una emotiva entrevista que me hicieron recientemente, después de recibir la Cruz de Hermana Blanca que él bendijo! Mientras hablábamos sobre estos acontecimientos a los dos nos brillaban los ojos… Le acompañaba el Rector de mi pueblo, también muy entusiasmado.


Me trajeron ejemplares de este periódico semanal del que os hablaba; finalmente hoy, os hago llegar escaneado este reportaje que tanto me ilusiona… ¡Qué débil, pero que feliz me siento!


Un fuerte abrazo y hasta el martes.


Càrol.