La Catedral de Lleida acogió el pasado domingo 24 de junio la ordenación al diaconado permanente de Francesc Domènech, vecino de La Granja d'Escarp. Un numeroso grupo de fieles y de sacerdotes acompañaron al nuevo diácono en una ceremonia donde también han participado el resto de diáconos permanentes.

En su homilía, el Obispo Salvador recordó a Ju an Bautista, con motivo de su festividad. Rememoró las palabras del profeta Isaías cuando dice "yo soy llamado y elegido por el Señor".

Además, destacó al nuevo diácono que "deberá ejercer con humildad y amor". También le animó a "imitar la vida de Cristo" y en "dedicar un especial servicio a la caridad a los pobres". El Obispo Salvador explicó que "hay pobres que no salen en los medios de comunicación, que están en nuestro entorno" y en la misma línea tuvo un recuerdo "para las personas migradas y refugiadas".

Tras la homilía tuvo lugar el ritual de la ordenación con la promesa del elegido, letanía de los santos, imposición de las manos y oración de ordenación, imposición de la estola y la dalmática y entrega del libro de los evangelios, continuando después con la liturgia de la Eucaristía.

Al finalizar ésta, el nuevo diácono permanente agradeció a su esposa ya su hijo. También tuvo palabras de agradecimiento al Obispo Salvador y al rector de La Granja d'Escarp, Paco Ribas. Por otra parte rememoró su formación y agradeció al Ramon Prat, ex director del IREL y al Doctor Laureano Sánchez, responsable de los Animadores de Comunidad de la diócesis.

Con la ordenación de Francesc Domènech, la diócesis de Lleida cuenta con seis diáconos permanentes.