Ariadna Grau, estudiante de integración social en colegio Episcopal, ha explicado en la web de las Llars del Seminari su experiencia este verano con los niños que residen. Os dejamos con su testimonio.

Soy Ariadna Grado Pasarisa, estudiante de integración social en el Colegio Episcopal. Durante este último curso académico hicimos una visita el proyecto de los Llars del Seminari, del que me llamó la atención sus peculiaridades, ya que va más allá de la sociedad individualista implica a los vecinos a ser partícipes del desarrollo comunitario.

Por mi parte tenía claro que mis prácticas las quería hacer en un centro donde hubiera niños, ya que anteriormente había cursado el grado superior de educación infantil. Así pues, mirando todas las posibilidades que había decidí realizar las prácticas en los Llars del Seminario porque su campo de intervención son las familias y los niños; colectivo que me despierta más entusiasmo e interés.

La tarea principal como practicante de integración social en las Llars del Seminario ha sido programar, organizar y desarrollar diferentes talleres para los niños de hasta 10 años, que viven que se han llevado a cabo durante el mes de julio y la mitad de agosto.

Estos talleres los hemos organizado con la ayuda de la Thelma, una voluntaria y la supervisión de Natalia, trabajadora Social. Los hemos llevado a cabo los miércoles en dos grupos diferenciados por edades y los jueves conjuntamente con los padres y madres. La finalidad de estos es potenciar la creatividad, disfrutar de la actividad y participar!

Mi experiencia en los Hogares ha sido muy gratificante porque me ha permitido aproximarme a una realidad social y profesional, la del trabajo social, me ha servido para tener un primer contacto en la práctica y aplicar algunos de los conocimientos teóricos adquiridos.

El contacto directo con la realidad me ha ayudado a conocer más a fondo los posibles campos de trabajo de cara un futuro, y poder reflexionar sobre diferentes cuestiones y situaciones. He podido profundizar en la especialización de la intervención familiar y comunitaria, lo que me ha permitido hacer una reflexión más profunda de las diferentes necesidades sociales.
 
Además, la posibilidad de estar en constante contacto con la profesional de trabajo social me ha permitido aprender diferentes funciones y adquirir las habilidades necesarias para poder desarrollar mi labor como futura integradora social, la capacidad de tener la empatía hacia el otro, establecer vínculo en la medida de aproximación, el acompañamiento y la comprensión. También ofrecer herramientas para poder resolver una situación de conflicto.
 
Finalmente quiero agradecer a todas las familias y profesionales para brindarme la oportunidad de realizar estas prácticas que me han permitido ampliar conocimientos.
 
Ariadna Grau Pasarisa