El local parroquial de Castelldans, ha acogido una charla dedicada a la tradición del Pesebre, a cargo de Jordi Curcó, historiador y periodista con raíces familiares en este pueblo de las Garrigues y invitado a hacer esta charla por el rector el pueblo Mn. Santiago Mataix.

La charla, reunió un buen número de niños de primera comunión de Castelldans y también del pueblo de La Albagés, acompañados por sus catequistas y también para padres y familiares.

Empleando un lenguaje comprensible para los niños y participativo, Curcó explicó que el Pesebre es por encima de todo y en sus orígenes, una tradición popular religiosa, que se inspira en un hecho religioso y sagrado.

La Encarnación del hijo de Dios Jesús: "El pesebre es para los cristianos una representación artística y plástica del Nacimiento de Cristo. Una herramienta pedagógica, catequética y bíblica, además de una forma visual, clara y sencilla de explicar el relato y misterio del nacimiento de Cristo en Belén ", dijo. Hacer el pesebre es explicar el Evangelio con imágenes, de una manera atractiva y comprensible que llega a todo el mundo".

Curcó habló de cómo alrededor del Pesebre ha surgido todo un mundo: "A su alrededor se ha ido formando un gran patrimonio de simbología, de tradiciones y costumbres populares, en el que se mezclan elementos reales e imaginarios, religiosos y profanos, históricos y anacrónicos. El pesebre es también: Cultura, Tradición y Arte, que forma parte de las raíces de nuestro pueblo ", aseveró.

Finalmente invitó a los niños y a todos a hacer el Belén en Navidad: "Ah, y cuando lo hagáis poned la ilusión del niño, tal vez una representación muy sencilla, pero que no falten las figuras fundamentales, sean clásicas o modernas, de plástico, de terracota ... y medite los mensajes de la venida al mundo del Niño Dios que son los de siempre: Amor, concordia y Paz, ayudar a los demás, la generosidad, la sobriedad, la sencillez y la humilidad. En definitiva el mensaje de humanidad y ternura del Niño Jesús, el hijo de Dios. Haced el pesebre, pero hacedlo con alma y si puede ser, bien cristianos y en definitiva bien humanos. Porque hacerlos sin alma, es construir un frío paisaje de invierno, falto de calor, desnudo y vacío del verdadero espíritu cristiano y humano de Navidad".