La Catedral de Lleida acogió el pasado jueves 13 de septiembre, por la tarde la Jornada del Envío, la celebración en la que la comunidad cristiana del Obispado de Lleida abre el curso. En la ceremonia, presidida por el Obispo Salvador, asistieron más de 250 fieles procedentes de toda la diócesis.

El Obispo Salvador destacó que "debemos pedir al Señor que nos dé la alegría y el coraje de vivir con coherencia para predicar a Cristo". En este sentido destacó que "tenemos que pedir a Jesucristo actitudes básicas para vivir la fe". Asimismo recordó que "el Papa San Juan Pablo II hablaba de que nuestra Iglesia fuera una casa y una escuela de comunión. Y remarcó la palabra escuela para que todos aprendemos de Cristo".


Por ello afirmó que "quisiera que todos los agentes de pastoral estén preocupados por nuestra formación". "Es importante que todos hagamos un esfuerzo para encontrar una formación no sólo de palabras sino también de vida". Además remarcó que "necesitamos más que nunca vivir la fe". Tras las palabras del Obispo Salvador, representantes de las diferentes delegaciones diocesanas (catequesis, juventud, enseñanza, familia, misiones, centros recreativos) entregaron un objeto representativo de su actividad como símbolo del trabajo prevista para este curso.

A continuación, el Obispo y la comunidad reeditaron el diálogo del Envío, un momento en el que los fieles se comprometen a vivir y transmitir la alegría de la Palabra de Dios. Este año la monición de entrada, las lecturas y las oraciones fueron a cargo de representantes de Cáritas Diocesana de Lleida.