El pasado sábado, 7 de mayo, se celebró en los locales de la Parroquia de Mercè de Lleida, la 17ª Jornada de Pastoral Penitenciaria. Fue una Jornada muy concurrida, de un gran nivel de comunicación de experiencias de corazones y mentes, hacia los que son los más pobres de entre los pobres, y así auténtica garantía, respecto al Cristo, de nuestra misericordia. 

La primera comunicación fue impartida por el padre Ramon Prat, vicario general de la Diócesis. Nos ofreció, con su lenguaje, tan apropiado, como acompañar las heridas personales, así como comunitarias. Siempre, claro, a la luz del Evangelio. Esto necesita, sólo se puede hacer, desde nuestra mirada interior, nuestro silencio, nuestra compasión, nuestra misericordia. Este silencio que escucha la Palabra, que como que estaba en el Principio, ya la tenemos en lo más profundo de nuestra existencia.

También José Miguel Turmo, secretario técnico de la prisión Ponent, relató como se hace el itinerario de prisión y de los prisioneros, que como Cristo, en su vía crucis, pasan por todas las vicisitudes jurídicas, de la entrada y la estancia, y lo más importante, de la salida, de esta prisión. Así es como todos nos hacemos prisioneros y liberados en Cristo, como dice el Apóstol.

A continuación, Agustí y Pilar, que esperan lo que esperamos todos, esta liberación, confirmaron definitivamente que los frutos de su voluntariado son ya de Dios, perfume adorable. Nuestro obispo Salvador compartió con nosotros su alegría por esta riqueza de la Diócesis.

Cándido Sánchez

Delegado de Pastoral penitenciaria del Obispado de Lleida