La Procesión del Traslado se consolida en el programa de actos y cultos de la Semana Santa leridana.

Una procesión que en sus inicios fue de corto recorrido, pero que se ha ido ampliando en trayecto y participación, así como mejorando diferentes aspectos de cara a la seguridad de los participantes en la misma. Este año en la calle Camp de Mart se ha restringido el estacionamiento de vehículos horas antes de la salida en Procesión.

Una vez finalizada la Misa de Triduo, se ha procedido a la recepción canónica de nuevos cofrades que han realizado su protestación de fe ante la comunidad, pasando a ser nuevos hermanos cofrades de la Hermandad y Cofradía.

Posteriormente al besapiés al Cristo de la Agonía, los hombres de trono han portado la imagen a hombros en el trayecto de traslado. La imagen de la Piedad de la Cofradía de la Piedad de Jaume I ha cerrado el cortejo procesional, al que han asistido diferentes representantes institucionales.