La Congregación de la Sang de Lleida ha informado hoy que los mantos de la Virgen de la Soledad, conservados en la Iglesia de la Sang, han salido esta mañana hacia Barcelona, en el día de Santa Lucía, para ser sometidos a un proceso de restauración por parte del equipo especializado en intervenciones en material téxtil Contex Restauració. Las piezas, tejiidas el 1929 en Casa Jorba, en Barcelona, gracias a una suscripción popular entre los devotos leridanos, se encuentran en un deficiente estado de conservación que obliga a intervenir para que no se pierdan unos mantos casi centenarios que, según los especialistas, son únicos en Catalunya por sus características.
El presupuesto estimado para la reparación es de 18.000 euros, que comprenden el manto procesional (el que vise la imagen de la Virgen cuando sale a la procesión del Viernes Santo), otro manto negro más corto, y un tercer manto aparecido en un armario con que antiguamente se vestía la Virgen por Pascua. Los gastos de la restauración se costearán, siguiendo el modelo con que se hizo el encargo de su elaboración: por aportaciones voluntarias de los fieles. Se podrá participar haciendo un ingreso bancario, o a través de un crowfunding. En el caso que se obtuviera más dinero del estimado para la restauración, el sobrante se destinaría a la reparación del falso techo del Oratorio.
El manto es una pieza confeccionada con terciopelo brodado con hilo de oro y originariamente con incrustaciones de pedrería y perlas naturales. Tiene una historia interesante. Se estrenó en la procesión del Santo Entierro de 1930, pero durante la Guerra Civil la imagen de la Virgen de la Soledad fue destruída y su corona desapareció. En cambio, los mantos fueron ocultados en las carboneras del edificio de la Maternidad, donde fueron hallados por sorpresa por una monja el 1939, cuando mucha gente los daba por perdidos. También se localizaron fragmentos del tabernáculo dorado que acogía la imagen de la Virgen, esculpida de nuevo en los años posteriores.
