La devoción Montserratina a la Virgen María mueve año tras año a los peregrinos de los pueblos de Almatret, Bellaguarda, Bovera, La Granadella, Granyena de les Garrigues, Juncosa, Llardecans, Maials, Sarroca de Lleida, El Soleràs, Els Torms, Torrebesses y este año Torres de Segre, acompañados por Mn. Josep Maria Cebrià, Mn. Adrià Burca y Mn. Paul Fecheta, a subir a la Montaña Santa.
La jornada empezó participando en la Misa Conventual, con la lectura del texto de presentación, por parte de Dolors, animadora de Comunidad.
En este texto se decía que "este año hemos subido a dar gracias por estos 40 años de Romería. Aquí vivimos la plegaria, la fraternidad, el confort y el calor de la fe. Hoy, nos gustaría coger de una manera especial, la alegría y la luz de la Virgen María con Jesús a su regazo que ha engendrado para dárnoslo y que Dios nuestro Padre les dé la alegría para revestirnos de la luz de Jesucristo y poder cantar el aleluya a pleno coro". La celebración de la Santa Misa contó con la participación de todos los peregrinos. En el momento del Ofertorio, a los pies de la Virgen María y en torno a Jesús resucitado, se presentaron el pan y el vino.
También se ofrecieron frutos del campo, flores, la chapa conmemorativa del 40.º cumpleaños y el trabajo de los niños y niñas por la Virgen María. Después de la Misa Conventual tuvo lugar el Santo Rosario, que este año fue debajo el cielo azul y rodeados de la natura.
Para acabar el curso se hizo la Conclusión del Curso, con la siguiente plegaria: "Señor concedéis a vuestros sirvientes de disfrutar siempre de la salud del cuerpo del espíritu y, por la gloriosa intercesión de la siempre Virgen Maria, liberadnos de la tristeza de la vida presente y dadnos la alegría de la vida futura. Por Cristo, Señor Nuestro."
Seguidamente cada parroquia se presentó en una bonita flor y una junto a la otra se unieron con un bonito ramo, como símbolo de la alegría, la diversidad y la fuerza de la unión. Para acabar la bendición final, por parte de Mn. Josep Maria Cebrià. Cada persona que representó a la parroquia, recogió la flor para presentarla a la Santa Misa de la Solemnidad del Cuerpo y de la Sangre de Cristo.
Dolors Esteve.