Tipus
Cerca de vosotros (Obispo Salvador)
Producció
Fecha publicación: 
Dom, 06/26/2016

Recordáis la información que contenía la glosa de la semana pasada sobre la Asamblea que celebró nuestra diócesis. Me pareció una obligación mía que tuvierais conocimiento de lo que tratamos y de lo que pretendíamos para pedir la colaboración de todos y llegáramos a servir mejor a nuestra Iglesia y a la sociedad en la que vivimos.

La ponencia que un servidor pronunció tenía como punto de partida explicar la razón de la convocatoria y delimitar el marco espacial y temporal. Parece una buena razón el inicio del ministerio de un obispo en una diócesis determinada, en este caso, hablamos sólo de Lleida.

Respecto a la línea temporal reconocemos el inmenso trabajo de los tres niveles de concreción eclesial después del evento del Concilio Vaticano II, del que hemos celebrado el 50 aniversario de su clausura y del que quedan muchas intuiciones y orientaciones para aplicar.

El nivel universal con el pontificado del papa Francisco y con su propuesta programática que contiene el Exhortación Apostólica postsinodal Evangelii Gaudium. A parte de sus escritos, no podemos olvidar sus palabras y sus gestos que son un fuerte impulso para todos los cristianos.

El nivel interdiocesano con el Plan Pastoral de la Conferencia Episcopal Española para el cuatrienio 2016-2020 y que lleva como título ‘Iglesia en misión al Servicio de Nuestro Pueblo’ y también las resoluciones y el mensaje del Concilio Provincial Tarraconense (1995) que nos permitió vincular estrechamente nuestras raíces culturales con el Evangelio y se amplía con dos documentos de los obispos de la Tarraconense titulados "Al Servicio de nuestro pueblo" (2011) y también "Transmitir el tesoro de la fe" (2013).

Y finalmente el nivel diocesano con las aportaciones que todos vosotros en la Asamblea del año pasado fijasteis en el documento-informe 'Iglesia de Lleida, qué dices de ti misma?'. Aquí están recogidas las realizaciones y aspiraciones de  nuestra Diócesis en los últimos años y que de ninguna manera pueden olvidarse.

Nuestra memoria es acumulativa y nos permite sacar partido. Nos sirve de mucho, y agradecemos, todo lo que hicieron nuestros antepasados. Tanto los lejanos en el tiempo, que vivieron en siglos anteriores, como las personas que recientemente habéis colaborado con el obispo Piris y muchos estáis participando ahora con un nuevo pastor. Personalmente també os lo agradezco. Sois conscientes de que esto, la memoria y la reflexión actual, son una tarea de todos; la responsabilidad es compartida.

En este momento nuestra obligación se centra en eliminar lo que, después de un análisis, no responde a la tarea evangelizadora actual y aprovechar la sabiduría que está contenida en propuestas evangélicas y es permanente al paso de los años. Da pleno sentido a la existencia y es fuente de felicidad para muchos.

Se explicaba después qué significa evangelizar y se describía un breve análisis de la sociedad actual para señalar los retos y los signos de esperanza que se manifiestan para dicha misión. Posteriormente se aludía a las personas, obispo, sacerdotes, religiosos y laicos que debían llevar a cabo esta tarea y el doble movimiento que encierra la evangelización, desde la comunión y desde la misión.

Continuaremos con una tercera glosa.

                                                       +Salvador Giménez, obispo de Lleida